Partido Guerra-Hambre: 190-1
Hay noticias que se comentan solas. Poco se puede añadir al descaro de los datos. Una de ellas es la publicada por el diario «El País» el día 9 de Junio de 2008, que transcribo:
Los gobiernos destinaron casi 850.000 millones de euros a gasto militar, pero en la pasada cumbre de la FAO se comprometieron a aportar 4.500 millones para luchar contra las hambrunas.
El gasto militar en el mundo alcanzó en 2007 la cifra de 847.500 millones de euros, un seis por ciento superior a la del año anterior y un 45 por ciento superior a 1998, según revela el informe anual de 2008 del Instituto Internacional de Investigación para la Paz (SIPRI), con sede en Estocolmo.Esta cantidad supone casi 190 veces las ayudas comprometidas por los gobiernos en la última cumbre de la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) para paliar la actual crisis alimentaria.
Estados Unidos, por sí solo, representó el año pasado el 45% del gasto militar en todo el mundo, muy por encima de países como Reino Unido, China (37,8 millones) o Francia (33,9). España ocupa el decimoquinto lugar de la lista de quince países con más gasto militar del mundo. El informe del SIPRI destaca también que las ventas de armas aumentaron un 8% entre 2005 y 2006. El gasto militar ha aumentado un 45% en todo el mundo en los últimos diez años.
Estas cifras contrastan con las cantidades aprobadas la semana pasada en la Conferencia de Alto Nivel sobre la Seguridad Alimentaria Mundial, celebrada en Roma bajo el patrocinio de la FAO, en la que los delegados anunciaron un incremento en 4.500 millones de euros de sus donaciones para combatir el hambre, promover el desarrollo agrícola y paliar la situación generada en gran parte del mundo, especialmente en los países pobres, por el auge del precio de los alimentos.
En el hipotético «partido de fútbol» entre la Guerra y el Hambre gana, pues, por goleada la Guerra. Nuestros mezquinos gobiernos firman, así, una de las realidades más escandalosas de nuestra sociedad. Quien diga que el problema del Hambre está fuera del alcance de la Humanidad, sencillamente miente como un bellaco. No hay falta de posibles, hay falta de voluntad.
Caen sobre nuestras conciencias, y sobre la de nuestros gobiernos que pueden y no hacen nada, los millones de muertes de seres humanos, los millones de asesinatos en masa que tan sólo cuentan 190 veces menos que el gastar una ingente cantidad de dinero en juguetitos para la guerra.
Sabemos que Dios no es indiferente a estas causas. ¿Lo seremos los cristianos? Espero que no.